Llega esta época y nos empezamos a hacer la famosa pregunta… “¿cuántos regalos debería de comprar a mi peque?”. “tiene de todo”, “luego no mira para ellos”, “pero no puedo dejarle sin regalos…” y así, muchas más frases que todos nos hacemos cuando tenemos que decidir que sí y qué no comprar a nuestro hijo/a, sobrino/a, etc.
Cómo sabemos, si preguntamos a ellos, seguramente nos dirán que quieren todo lo que han escrito en la carta, y en la mayoría de casos no podrán decidir cuál es su preferido. Como adultos, somos nosotros los que en todo momento debemos decidir qué es bueno para él/ella.
Hoy, os vengo a hablar de la “REGLA DE LOS CUATRO REGALOS”, os lo propongo como idea, una propuesta que implementan pedagogos y expertos en la infancia y en la que hay que tener en cuenta los siguientes requisitos:
- El primer regalo, debe de ser algo que sirva para llevar encima, como puede ser ropa, unas zapatillas nuevas, una camiseta de fútbol, un nuevo maillot de ballet,….
- El segundo regalo debe de ser algo para leer, un libro, un diario, un álbum ilustrado… (dependiendo la edad lo adaptamos).
- El tercer regalo debe incluir algo que realmente desee, aquí incluimos ese juguete o juego que lleva tanto tiempo pidiendo y que sabemos que según lo vea le va a hacer mucha ilusión.
- El cuarto y último regalo debe de ser algo que realmente necesite, como por ejemplo, una mochila nueva.
Visto así, parecen poquitos regalos… porque siempre se acaban juntando los de los tíos, abuelos, primos, amigos,… y parece que nuestro peque no tiene tiempo para atender a todos lo que se acumulan durante estas fechas navideñas, jugando al final siempre con los mismos. Así que pensemos un poquito en estas 4 reglas.
Mi reflexión final, sin duda, es que se trata de apostar por la calidad de los regalos, y no por la cantidad, no debemos darle una avalancha de juguetes, si le preguntamos “¿qué quieres estas navidades?” y su respuesta es “no sé”, hemos cometido un error, ya que tener todos los juguetes del mundo no hace a los niños y niñas más felices.
Además, NO TODO SON JUGUETES, pasar tiempo en familia, es tiempo de calidad para estas vacaciones de Navidad.
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